Este postre italiano es uno de mis favoritos. Siempre que salgo a comer a un restaurante italiano, si no tienen pannetone, que para mi es irresistible, pido panacotta. Significa nata cocida y es tan sencillo como eso: una nata cuajada, cremosa y llena de sabor.
Mirad qué fácil.
Ingredientes
400 grs de nata líquida (2 bricks de los pequeños)
100 grs de leche
90 grs de azúcar
6 láminas de gelatina neutra
1 cucharada de azúcar avainillado o un chorrito de esencia de vainilla
Preparación tradicional
Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fria. Para ello, cogemos un cuenco con agua fria del grifo y vamos echando una a una las seis hojas de gelatina.
Por otro lado, ponemos en un cazo la nata, la leche, el azúcar y la esencia de vainilla y lo ponemos al fuego, removiendo de forma continua hasta que se mezcle bien y notemos que se ha deshecho el azúcar (unos 8 minutos). Añadimos de una en una y bien escurridas las hojas de gelatina neutra, removiendo hasta que vemos que se deshacen (es casi inmediato ver cómo desaparecen como por arte de magia). Apagamos el fuego y vertemos en los moldes que vayamos a usar (os aconsejo moldes rígidos, tipo flan, que desmoldan mejor las cosas blanditas que los de silicona, o bien vasitos para tomar la panacotta como si fueran natillas). Dejamos templar y guardamos en la nevera durante al menos 4 horas para que la gelatina cuaje bien el preparado.
A la hora de servir, desmoldamos y decoramos como más nos guste. En mi caso, con mermelada de mora y una fresa. Pero le va genial el coulis de frambuesas, que es tan fácil como batir 200 grs de frambuesas con 200 grs de azúcar, calentar en un cazo para que espese y se funda bien el azúcar con la frambuesa y dejar enfriar.
Preparación en Thermomix
Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fria. Para ello, cogemos un cuenco con agua fria del grifo y vamos echando una a una las seis hojas de gelatina.
Por otro lado, echamos en el vaso la nata, la leche, el azúcar y la esencia de vainilla y programamos 10 minutos a 90ºC velocidad 2.
Un minuto antes de que finalice el programa, añadimos por el bocal las hojas de gelatina una a una bien escurridas y dejamos que se derritan. Vertemos en los moldes que vayamos a usar (os aconsejo moldes rígidos, tipo flan, que desmoldan mejor las cosas blanditas que los de silicona, o bien vasitos para tomar la panacotta como si fueran natillas). Dejamos templar y guardamos en la nevera durante al menos 4 horas para que la gelatina cuaje bien el preparado.
A la hora de servir, desmoldamos y decoramos como más nos guste. En mi caso, con mermelada de mora y una fresa. Pero le va genial el coulis de frambuesas, que es tan fácil como batir 200 grs de frambuesas durante 10 segundos a velocidad progresiva 5-10 y añadir 200 grs de azúcar, programando 30 minutos 100ºC velocidad 2.
Espero que os guste tanto como a mi.
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